3 preguntas a Raffaella Ferrero Camoletto

Raffaella Ferrero CamolettoPublicó  un libro titulado Oltre il limite – Más allá del límite – (Il Mulino, 2006) un estudio sobre las nuevas tendencias del deporte. ¿Cuál es la situación que presenta?
Un contexto en transformación. La comercialización y la espectacularidad han creado un sector del mercado cuyas lógicas, con frecuencia, prevalecen sobre las estrictamente deportivas, poniendo de relieve el interés por competir y vencer cueste lo que cueste. El consumo pasivo del deporte ante el medio televisivo ha reforzado la cantidad de “sedentarios” que hoy llega al 40% de la población italiana. Las tecnologías deportivas, con la constante innovación en la línea de los proceso y de los productos, ha colonizado el cuerpo del deportista, transformándolo en un cuerpo-máquina. La cantidad de medicamentos que recibe el cuerpo de los deportistas nos lleva al mundo del súper-hombre y explica la difusión, como una mancha de aceite, del doping, tanto en campo profesional como en el amateur e incluso en el sector juvenil.

Por tanto, ¿el escenario es bastante sombrío?
No, estas transformaciones también nos abren posibilidades inéditas, aunque sus colores aún son indefinidos. Hay un regreso a la dimensión ritual del deporte: las manifestaciones deportivas masivas expresan la necesidad de una sociedad festiva, de una efervescencia colectiva, más que de una fuerte competencia.
La innovación tecnológica responde también a necesidades sociales: la evolución de la bicicleta normal a la bicicleta de montaña, por ejemplo, manifiestan el deseo de alejarse con los ambientes congestionados de la ciudad para sumergirse en la naturaleza, explorando recorridos no definidos.
Aumenta la sencilla práctica deportiva y disminuye el interés por el deporte competitivo tradicional y claramente está creciendo la actividad deportiva como búsqueda del bienestar físico, relación con la naturaleza y búsqueda de nuevas formas de socialización. La gente y en especial las mujeres y las personas menos jóvenes tienen una nueva comprensión del deporte y del cuerpo.
En escena, aparecen nuevas formas deportivas que desplazan el énfasis de la competición con un adversario al desafío con nosotros mismos: aquí se encuentra la galaxia de las prácticas deportivas que se encuentran bajo el nombre de freerid, freestyle, hasta los deportes extremos. Estas prácticas testimonian una búsqueda de autotrascendencia, de un salir de sí mismos, de una mejora de la calidad de vida.

Un deporte vivido de esta manera ¿puede abrir los horizontes a la fraternidad?
El paso de un deporte competitivo de una sola disciplina a un deporte con más dimensiones refleja muy bien la compleja naturaleza del hombre, que está en la búsqueda de momento de trascendencia como de cuidado del propio cuerpo, de competencia como de abrazos de socializad, de esfuerzos y de gratuidad.